La vista y el suave sonido del agua en el casco provocan una calma especial y esa sensación única de estar en el fin del mundo. ¡Pasar una noche fondeado es uno de los mejores momentos de un crucero! Pero, ¿cómo asegurarse de que el ancla aguantará bien en el fondo? Descubra con TEMO los 8 pasos que no debe perderse para lograr fondear con total tranquilidad. Son los preparativos imprescindibles para echar anclas con una adecuada combinación de talento y buen humor.
Conecte su TEMO: ¡pronto lo utilizará!
1. Encuentre el lugar perfecto
El anclaje ideal reúne varios criterios:
- Debe estar resguardado del viento y del oleaje, sin encontrarse demasiado cerca de la costa.
- El fondo debe ser arenoso o fangoso, especialmente si desea varar su bote. No se recomiendan los fondos rocosos porque el agarre del ancla no es bueno allí. Las praderas de fanerógamas o corales son zonas con un ecosistema sensible en las que está prohibido fondear.
Una vez definido el lugar, se requiere un control meteorológico para monitorear la evolución de vientos, oleajes, corrientes y mareas.
2. Equípese antes de manipular el ancla
No insistimos lo suficiente, pero las zapatillas (¡y no chancletas!) y los guantes son más que recomendables para la persona que trabaja en cubierta. Aunque la mayoría de las embarcaciones de recreo están equipadas con un molinete eléctrico, siempre es útil poder intervenir manualmente sin lesionarse.
Cuide su espalda durante las manipulaciones: trabaje con las piernas dobladas y uno de los pies hacia adelante.
Recordatorio: Hablamos de intervención “manual” pero lo mejor que se puede hacer en caso de incidente es estabilizar la cadena con el pie y, luego, retirarla con la mano. ¡ Tenga cuidado de no dejarse las yemas de sus dedos atrapadas en el pescante !
3. Calcular la longitud de la cadena correcta
La longitud de cadena a desenrollar varía según la altura del agua, es decir, la distancia entre el fondo del agua y la parte inferior de la quilla. En marea alta, se recomienda dejar al menos 3 a 4 veces la altura del agua. Añada una o dos longitudes más en caso de mal tiempo y asegúrese de que su zona de evitación no invada la de sus vecinos.
Recordatorio : Un ancla se adhiere al fondo de manera óptima cuando se ejerce tracción horizontal. Por lo tanto, cuanta más cadena ancle, mayor será su zona de evitación, por supuesto, pero su ancla estará más firmemente asentada en el fondo del agua.
4. Revise toda la línea de amarre
Para una primera salida al inicio de la temporada o en un barco de alquiler, se recomienda sacar y extender toda la línea de amarre en la cubierta. Esto le permitirá, entre otras cosas:
- Tomar nota de las marcas de longitud, indicadas por líneas de color sobre la cadena.
- Verificar el estado de la cadena y los puntos de enganche con el ancla y el barco. Sí, insistimos en eso de “con el barco”: ¡todavía sucede con demasiada frecuencia que algunas anclas hacen “chof” y desaparecen por arte de magia!
Por cierto, ¿y si aprovechamos para probar también el molinete eléctrico ?
5. Extra: señalizar su ancla para izarla más fácilmente
En fondos potencialmente rocosos, esto implica atar una cuerda a la parte delantera del ancla y conectarla a una pequeña boya. A la hora de partir, retomando esta línea, podrá izar el ancla con facilidad y evitar que se enganche en el fondo.
6. Afine su estrategia de comunicación con su equipo
Durante las maniobras, el patrón es quien dará las instrucciones al timonel. ¡Con el ruido del molinete y el motor, es fundamental tener un modo de comunicación efectivo! Por lo tanto, el timonel y el patrón deben acordar un lenguaje sencillo mediante gestos y/o palabras breves antes de partir.
7. ¡Por fin podemos echar el ancla!
La maniobra de aproximación
Por razones de simplicidad y seguridad, optaremos por una aproximación motorizada. Se procede a la maniobra, entonces, de la siguiente manera :
- Ponerse de cara al viento.
- Cambiar a neutral hasta que el barco vaya a ralentí.
- Echar el ancla y, en el proceso, humedecer la cadena gradualmente, no de repente, incluso aunque eso signifique hacer una pequeña marcha atrás, si el viento no es suficiente, para extender bien la cadena y en su justa medida.
Justo después de echar el ancla
Una vez que haya humedecido la longitud correcta de la cadena y la haya asegurado a una abrazadera, es hora de verificar que el ancla esté bien fondeada. Dos formas de comprobarlo:
- Tomar la cadena en la mano, sin apretarla. Se puede notar inmediatamente tanto si el ancla está estabilizada como si no.
- Tomar una alineación en el suelo y verificarla a los 5 minutos, y luego a los 10 minutos. ¿Se va a quedar un poco más? Cuando el barco bascule vigile su zona de evitación y efectúe una nueva alineación.
8. Lance su bote y saque su TEMO
Ahora que su barco está estabilizado, todo lo que tiene que hacer es disfrutar de una buena bebida fría con su tripulación. Así pues, ¡eche su bote al agua y sujete su motor eléctrico TEMO para explorar la costa!
Atención : aquí consideramos que el fondeo se realiza en condiciones climáticas óptimas. Le daremos otros consejos para fondear su ancla en condiciones de mal tiempo en un artículo futuro. 😉
Un amarre exitoso es, ante todo, tomarse el tiempo para prepararlo bien. Localizar el lugar ideal, examinar la climatología, equiparse correctamente y calcular y comprobar la longitud de la cadena son pasos que no debe omitir, sin olvidar acordar, entre tripulante y timonel, los detalles de la maniobra. Estos son los ingredientes esenciales para fondear y hacer escala en tierra con su TEMO.
Y usted, ¿ cuáles son sus consejos para un amarre 100 % exitoso ?